La arqueología es la ciencia que estudia a los grupos humanos a través de sus restos materiales, abarcado temporalmente desde los primeros homínidos hasta la actualidad. Mediante los restos materiales y su contexto, las/os arqueólogas/os buscan interpretar diversos aspectos relacionados con la cultura, como las formas de subsistencia, la organización sociopolítica, las creencias, entre otros, además de los cambios que han experimentado a lo largo del tiempo y los diversos factores involucrado en estos.

Son espacios en donde se encuentran las evidencias que han dejado los grupos humanos del pasado. Pueden ser restos de edificaciones de diferentes tamaños, (aisladas o aglutinadas en aldeas), desechos de diversos tipos de actividades domésticas y/o ceremoniales, fúnebres (ya sean cementerios o tumbas aisladas),  manifestaciones de arte rupestre (como petroglifos, pinturas o geoglifos), antiguas vías de comunicación (como caminos y senderos) entre muchos otros. Estos restos pueden concentrarse en espacios acotados de unos cuantos metros o encontrarse dispersos en áreas que fácilmente pueden abarcar decenas de kilómetros

A lo largo de todo el territorio de Chile es posible encontrar sitios arqueológicos.

La totalidad de los sitios arqueológicos de Chile se encuentran protegidos por la Ley N° 17.288 de Monumentos Nacionales, bajo la figura de Monumento Arqueológico. Esto significa que son propiedad del Estado y no pueden ser intervenidos ni excavados sin una autorización otorgada por el Consejo de Monumentos Nacionales, organismo encargado de velar por su protección.

Solo las/os arqueólogas/os con formación profesional pueden excavar un sitio arqueológico, previa obtención de un permiso otorgado por el Consejo de Monumentos Nacionale

No, porque son propiedad del Estado. Asimismo, según la Ley N° 17.288 de Monumentos Nacionales, la apropiación y comercialización de restos arqueológicos es un delito, con penas que van desde multas a penas de cárcel.

Lo primero es detener las excavaciones y no seguir interviniendo el lugar. Luego, deberá contactarse con el Consejo de Monumentos Nacionales para que este organismo del Estado envíe a un arqueólogo para evaluar la naturaleza del hallazgo y determine las medidas que se deben tomar para su resguardo. Otra opción es que se contacte con la Brigada de Delitos del Medio Ambiente de la Policía de Investigaciones (BIDEMA). Al avisar oportunamente sobre un hallazgo evitarás su deterioro. Adicionalmente, no dar aviso de un hallazgo arqueológico constituye un delito.

Lo principal es no intervenir el lugar ni recoger los restos que encuentre, ya que si lo hace se perderá el contexto del hallazgo. Si siente curiosidad sobre estos restos, puede enviarnos una foto al mail colegio@arqueologos.cl, para que le informemos sobre la naturaleza de los restos. 

Realizar la denuncia directamente a Carabineros, al Consejo de Monumentos Nacionales o a la Brigada de Delitos del Medio Ambiente de la Policía de Investigaciones. Cabe señalar que según la Ley N° 17.288 de Monumentos Nacionales, la alteración y destrucción de sitios arqueológicos constituye un delito que pueden ser penalizado con multas o cárcel.

Los sitios arqueológicos y los restos que lo componen, solo pueden ser comprendidos cuando se estudian en su contexto. Si recoge los restos de su lugar de origen, se pierde gran parte de la información que contienen para la comprensión de nuestro pasado.

Porque los sitios arqueológicos contienen los únicos remanentes de los diversos grupos humanos que han habitado nuestro territorio. Al alterar o destruir los sitios arqueológicos, se borra irremediablemente una parte de nuestro historia.

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No. Aunque los sitios arqueológicos y los restos que contienen son propiedad del Estado, este no puede expropiar el terreno en donde se emplazan.